10 May Paydos 2016 y carrillera de ternera
Ingredientes
1 botella de Paydos 2016 (o de una añada anterior, si eres de los que guardas el vino)
1/2 l. de caldo de carne
3 carrilleras de ternera, bien limpias y enteras
2 cebollas grandes
2 dientes de ajo (opcional)
1 puerro
Sal, pimienta, laurel, romero y las especias que más te gusten
Harina para sellar las carrilleras (opcional)
Este delicioso plato lo acompañamos normalmente con nuestro vino Paydos, y lo elaboramos también con él porque es el complemento ideal de la receta.
Es uno de los platos que ofrecemos a nuestros invitados cuando reservan la experiencia DISFRUTAR y pasan un día con nosotros, catando los vinos y empapándose de nuestra historia.
Como siempre, empezaremos por abrir la botella de Paydos y servirnos una copa, que seguro que nos entra de maravilla según vamos elaborando el plato.
Hay que limpiar muy bien las carrilleras, quitarles esa pielecilla que tienen por encima, y dejarlas enteras.
Como en la receta del ragout con Alonso del Yerro, las pasamos ligeramente por harina para sellarlas en una sartén donde hemos rellenado previamente el fondo de aceite y lo tenemos ya caliente. No es obligatorio pasarlas por harina; se pueden sellar directamente en el aceite y quedarán igual de ricas y más ligeras.
Una vez sellada la carne, la ponemos en una cazuela. Espero que tengáis ya una crock-pot, porque este plato queda espectacular cociendo a baja temperatura durante 8 o 9 horas.
En la sartén que hemos utilizado para sellar la carne, ponemos a dorar la cebolla, el puerro y el ajo, todo bien picadito, y esperamos pacientemente a que se tueste bien la cebolla, sin quemarse. Añadimos entonces 2 buenos vasos de vino tinto, el caldo, la sal y la pimienta y todas las especias que hayas elegido. Nosotros solemos utilizar romero fresco, laurel y algunas veces, tomillo, todo recogido en el momento en Santa Marta. Removemos y dejamos cocer lentamente durante diez minutos. Lo añadimos a la crock-pot o a la cazuela y dejamos cocer lentamente, si es en cazuela normal, al menos unas 4 horas a fuego lento, removiendo de vez en cuando. La salsa irá espesando y se quedará un guiso magnífico, tierno y sabroso, para disfrutar en todas las épocas del año. Y la carne se partirá en trocitos ella sola, según se va ablandando.
Este guiso también está mejor de un día para otro, de modo que, al día siguiente, simplemente hay que dejarlo cocer tranquilamente a fuego muy bajo unos 10 minutos y ¡listo para servir!
Nosotros lo acompañamos con puré de patatas… y a ser posible, de nuestra huerta.
¿Con qué lo acompañarías tú?
-María